18 noviembre 2009

Fotografiando a mis peces

Aprovechando que tengo una cámara reflex bastante decente a mi alcance me he lanzado a esto de fotografiar peces de acuario. Lo primero es decir que es bastante difícil y que no todo depende de la cámara, es más, diría que es lo de menos siendo esta tipo reflex. En el poco tiempo que llevo haciendo fotos he aprendido que lo más importante es el manejo de la luz y para esto hace falta invertir un poco de dinero en un flash, cosa que yo aún no he hecho. Por supuesto, conocer el funcionamiento de la cámara es imprescindible. Hasta ahora creo que he mejorado las fotos que hacía antes pero todavía me queda camino por delante. Y ahora las fotos.


Hembra de Neolamprologus multifasciatus.

25 agosto 2009

Por aqui estamos aunque no lo parezca

Aunque hace ya mucho tiempo que no escribo sigo por aquí y, lo más importante, sigo con mi afición. Mantengo los dos mismos acuarios y con los mismos peces pero han crecido un poquito. Si todo me va bien no tendréis noticias mías por un tiempo y esto será así porque mi vida va a entrar en un intervalo de tiempo en el que nada nuevo pasará pero al finalizar este paréntesis (que espero no dure más de un par de meses) apareceré con nuevos proyectos, otros acuarios y más cíclidos. Hasta ese momento espero que tengáis muy buenos momentos en vuestras vidas. Si queréis seguir informados acerca de lo que se cuece en el mundo de los cíclidos no dejéis de pasar por el foro de Riftmaniacos y por cualquiera de los blogs que enlazo en la columna de la izquierda pero sobre todo no os saltéis la visita al blog de Miguel Mora, que se está convirtiendo en una pequeña enciclopedia sobre el Tanganyika. Y recordad que esto es un hasta luego, volveré.

08 abril 2009

Ansiado futuro.

Ultimamente veo, más bien leo, con orgullo como en los foros se mueve mucho el tema de poner nuestros cocos a pensar para la mejora de nuestra gran afición. Los hay que ponen su buen arte con el bricolaje para hacer filtros de fabricación propia, los hay que se meten más de lleno y hacen sus acuarios, otros intentan aplicar conocimientos en otras materias para la mejora de la vida de sus peces....Todo esto hace que la afición avance y cree un tejido de personas que son las que realmente nos pueden hacer grandes dentro del panorama acuariófilo español. Ahora mismo está claro que toda la acuariología va a rebufo de las innovaciones que se producen en marino que es donde más caro se paga todo y donde, por este mismo motivo, el ingenio del aficionado se ha agudizado mucho para ahorrar dinero. Pero quiero imaginarme un tiempo en donde, y gracias a las características especiales de nuestra parcela acuarística, podamos estar a la altura del marino. Creo que ese momento llegará, más temprano que tarde, porque estoy convencido que a cariño por nuestros peces y por todo lo que les rodea no nos gana nadie. Será maravilloso cuando todas las tiendas sean "especializadas" en cíclidos africanos como lo son ahora de marino y tengamos una amplia gama, no tan sólo de peces, sino de productos diseñados en exclusiva para nosotros.

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Now playing: Duquende - Niquelao
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25 febrero 2009

¿De dónde vienen los nombres de nuestros cíclidos?

Todos manejamos términos como “especie, género, variedad, raza….” pero ¿realmente sabemos de lo que hablamos? En este artículo intentaré explicarlos y dar unas indicaciones de cómo se deben pronunciar correctamente los nombres de nuestros cíclidos. Evidentemente, todo lo dicho servirá para cualquier especie del mundo animal o vegetal.
Un género es el escalón que se ubica entre la familia y la especie; así, un género es un grupo que reúne a varias especies emparentadas, sin embargo, existen algunos géneros que son monoespecíficos (contienen una sola especie). A modo de ejemplo un género sería el Neolamprologus perteneciente a la Familia de los cíclidos. Si os fijáis cuanto más arriba nos situamos (en el gráfico) más similitudes tienen los individuos entre si. Dos peces, animales, plantas…de un mismo grupo comparten muchas características pero también hay otras que los diferencian. Si embargo en el nivel del género las igualdades son más numerosas.
¿Y qué es una especie? Pues se define a menudo como grupo de organismos capaces de cruzarse y de producir descendencia fértil. Mientras que en muchos casos esta definición es adecuada, hay casos en los que se necesitan de medidas más exactas o que diferencien más una especie de otra (sino pensad en los híbridos de nuestros cíclidos que son capaces de generar descendencia y no se catalogan como especie). Por ejemplo se usan métodos basados en la semejanza del ADN o en la presencia de rasgos local-adaptados específicos.
Se denomina variedad o subespecie a cada uno de los grupos en que se dividen las especies, y que se componen de individuos que, además de los caracteres propios de la misma, tienen en común otros caracteres morfológicos por los cuales se asemejan entre sí y se distinguen de los de las demás subespecies. Desde el punto de vista estrictamente sistemático o de la taxonomía, es la categoría taxonómica comprendida entre la especie y la raza. La subespecie es una parte de la especie formada por una o más poblaciones, poco diferenciadas y con una distribución regional concreta. Esta definición incluye las razas geográficas de muchos autores, lo que nosotros entendemos por variedad geográfica por ejemplo en los Tropheus sp. Sin embargo, no está muy clara la línea de separación entre los conceptos de raza y subespecie, pues ambos taxones mantienen las características propias de la especie, es decir, que parejas de individuos de distintas subespecies o razas (pero de la misma especie) se pueden emparentar y producir descendencia viable y fértil. Además, sólo se suelen diferenciar en caracteres externos menores aunque reconocibles y regularmente presentes.
El término raza se utiliza con más frecuencia fuera del ámbito científico, por lo que, en taxonomía, sólo se emplea (por tradición) para la distinción morfológica en un número muy limitado de especies, esencialmente los seres humanos y los animales domésticos.
¿Por qué nombramos así a nuestros peces? Los nombres de las especies son binominales, es decir, están formados por dos palabras que, debido a convencionalismos adaptados por la comunidad científica, deben escribirse en un tipo de letra distinto al del texto general, normalmente se hará en cursiva aunque también puede hacerse con la misma tipografía pero entrecomillado, en negrita o subrayado. De las dos palabras citadas, la primera corresponde al nombre del género al que pertenece y se escribe siempre con la inicial en mayúscula; la segunda palabra es el nombre específico y debe escribirse enteramente en minúscula y concordar gramaticalmente con el nombre genérico. Así, en Neolamprologus multifasciatus, Neolamprologus es el nombre genérico, multifasciatus el nombre específico y el binomio Neolamprologus multifasciatus es el que designa a esta especie de cíclido.
El nombre específico nunca debe ir aislado del genérico ya que carece de identidad propia y puede coincidir en especies diferentes. Si se ha citado previamente el nombre completo y no cabe ninguna duda de a qué género se refiere, el nombre del género puede abreviarse a su inicial (N. multifasciatus).
Bien, ya sé lo qué es una especie, variedad, raza, género… pero ¿por qué se utiliza el latín para designar a las especies? Pues es debido a que cuando el ilustre botánico sueco Linneo empezó a nombrar y clasificar plantas utilizó este idioma para ello. En esa época (y en la actual sigue siendo así aunque en menor medida) el latín era la lengua “oficial” científica, de tal manera que un artículo, conferencia o libro publicado en cualquier parte del mundo era entendible por cualquier científico. Además, el latín al ser una lengua muerta tiene una gran ventaja y es que no está sometida a las posibles variaciones que tienen todos los idiomas. El uso del latín para nombrar especies es una muy buena medida ya que imaginaos que si, por ejemplo, una misma especie de pez se nombra de diferente forma según en que zona de España estemos, el desaguisado que sería identificar y conocer a esa misma especie en todos los idiomas del mundo.
Los castellano parlantes tenemos ventaja a la hora de pronunciar correctamente los nombres en latín ya que el español es una lengua latina. Realmente, todo se pronuncia igual que en nuestro idioma menos en ciertos casos en los que hay que seguir una serie de normas que no son más que las utilizadas para pronunciar el latín clásico, así pues, tenemos: ·

  • Las vocales se pronuncian como en español, incluidos los diptongos. Pero la /i/ consonántica se pronuncia como la “y” española : iam=yam.
Las consonantes se pronuncian igual que en español salvo las siguientes excepciones:
  • La “c” delante de cualquier vocal suena como “k” española: fasciatus= faskiatus, furcifer= furkifer, multifasciatus= multifaskiatus.
  • La “g” siempre suena como la “g” española de gato: longior= longuior.
  • En lo fonemas “gu” y “qu” la “u” se pronuncia siempre: hecqui= ekkui.
  • La “ll” era una doble “l” por lo que habrá que pronunciarlas por separado: calliurus=cal-liurus.
  • La “x” final se pronuncia como “ks”: mustax=mustaks.
  • La “h” se pronunciaba con una ligera aspiración, pero esto era tomado como un signo de afectación por lo que no se pronunciará.
  • La “ph” sonará como “f”: tretocephalus= tretokefalus.
  • En lo diagramas “ch”, “th” y “rh”, la “h” no se pronunciará, por ello se leerán como si sólo estuvieran la “c”, “t” y “r”: pulcher= pulker.
  • La “j” no existe en latín clásico. En latín vulgar representa “i” y puede pronunciarse como “i” o como “y”: Julidochromis= Yulidocromis o iulidocromis.
Ahora unos ejemplos:
  • Simochromis marginatus= Simocromis marguinatus
  • Callochromis macrops= Cal-locromis macrops
  • Cyathopharynx furcifer= Kiatofarinks furkifer
  • Neolamprologus brichardi= Neolamprologus bricardi
  • Xenotilapia ochrogenys= Xenotilapia ocroguenis
¿Difícil? Si conseguimos pronunciar bien cualquier persona del mundo debería saber de qué especie estamos hablando. Con esto se dejan de lado las diferentes pronunciaciones de los idiomas y se llega a un consenso científico para que todos nos entendamos. Probar a pronunciar con detenimiento y veréis como muchas lo hacíamos mal. Por último decir que si se te hace imposible pronunciar con las normas que he comentado antes esta permitido por la RAE nacionalizar la pronunciación de cualquier idioma por lo que me imagino que con el latín también, así que tiene una excusa.
Pero ¿qué razones hay para poner uno u otro nombre? Pues bien, existen algunos aspectos universalmente adoptados por la comunidad científica para la formulación de la nomenclatura binaria. La persona que describe por primera vez una especie (su "autor") es la que tiene el privilegio de darle nombre. Cuando el autor elige asignar un nombre o epíteto específico derivado de un nombre propio, es a título de homenaje o reconocimiento, dedicándosela a un colega, amigo o familiar, en forma latinizada. Por supuesto, se considera de mal gusto y signo de egocentrismo que el autor se dedique la especie a sí mismo. Por ejemplo, todos sabemos que Neolamprologus brichardi esta dedicado a Paul Brichard. También se puede dedicar una especie a un organismo come es el caso de Tanganicodus irsacae en el que el nombre específico es en honor del “Institut de Recherche Scientifique en Afrique Centrale” (IRSACAE, acrónimo feminizado). En otros casos, los nombres se eligen en referencia a caracteres o propiedades del ser vivo que se nombra, p. ej. en Neolamprologus tretocephalus se nombró así por la característica de este pez de presentar agujeros sensoriales en su cabeza.


Bibliografía: http://es.wikipedia.org. Artículos consultados: “Especie”, “Nomenclatura Binomial”, “Subespecie” y “Latín”.
Ilustración de Peter Halasz.

Este artículo fue escrito para Riftmaniacos y ahora lo pongo aqui

19 febrero 2009

Actualizando....

Ayer mi di cuenta de que mi blog cumplió dos años el día 17 de Febrero. Dos años ya, como pasa el tiempo. En este periodo he aprendido mucho sobre los cíclidos del lago Tanganica, menos sobre los del Malawi todo hay que decirlo, pero lo mejor de todo ha sido conocer a gente estupenda que comparte mi afición. Es maravilloso como alrededor de un lago, que esta en la otra parte del mundo, se puede crear una comunidad tan extraordinaria de gente aqui en España, además muy posiblemente el único lazo de unión entre todos sea el amor por estos pequeños cíclidos. Además, se esta creando una pequeña red de blogs sobre los cíclidos gracias a gente como Miguel Mora, Lucas (Lukilu333), Joan (nerita19), Joexerez y muchos más que seguro se unirán, y por supuesto están esos dos maravillosos foros que cada día crecen más y más y hacen que la afición lo haga a la par que ellos, me refiero a Riftmaniacos y Aquacíclidos.
Por mi parte, seguiré escribiendo este blog porque a veces me sirve de válvula de escape y aprendo muchísimo haciéndolo. Ayer y gracias a la ayuda de mi amigo Javi (Brichardi), otra maravillosa persona conocida a través de la red, he podido colocar un buen encabezado para el blog. La composición es suya y yo lo único que he hecho ha sido subirla al blog. Creo que ha quedado genial y desde aquí le quiero dar las gracias a Javi por la molestia que se ha tomado y el tiempo que ha invertido.
Y ya que estoy voy a actualizaros como van mis acuarios. El otro día pasé por Aquatic, genial tienda de Alzira, y me llevé un bote de comida de New Life Spectrum que ya comentaré algo sobre ella si veo cambios en mis peces, y un par de peces a los que cuando se establezcan bien en su acuario ya presentaré en sociedad. Y esto es todo por ahora a la espera de seguir llenando la hucha y que llegue el momento de abrirla y comprarme el acuario de 300 litros ¿Me llegará con el dinero de la hucha? Ya lo veremos.
Gracias por leerme.

11 febrero 2009

Tanganicodus irsacae

Tanganicodus irsacae es el más pequeño de los gobios del lago Tanganica, tanto es así que los machos alcanzan solamente 6.5 centímetros en edad adulta y las hembras 5.5. Además, también es el que se puede considerar menos hervíboro ya que análisis del contenido intestinal de estos peces ha resuelto que la mayor parte de su dieta consiste en invertebrados aunque las algas también son parte importante de su alimentación.
A un primer vistazo, T. irsacae, se puede parecer mucho a Eretmodus sp "cyanostictus North" o a Spathodus erythrodon pero se distingue de estas dos especies por presentar un punto negro en su aleta dorsal y por el hocico punteado en su totalidad. Por otra parte, siempre podemos recurrir al estudio de la dentición para distinguir entre especies. T. irsacae presenta unos dientes largos y puntiagudos totalmente adaptados para atrapar a sus pequeñas presas.
A Tanganicodus irsace lo podemos encontrar a lo largo de los dos tercios norte del lago. Como he dicho anteriormente, todos los individuos de estas especie tienen un punto negro en la aleta dorsal, pero la localización de este rasgo diferenciador cambia ligeramente según la procedencia del pez. Las poblaciones de la zona al norte del río Malagarasi presentan el punto negro situado más o menos en el filo de la aleta dorsal, mientras que en las del sur del río, el punto se situa junto al nacimiento de la aleta en el cuerpo, desdibujándose con una o más barras verticales.
La población de Uvira (en el extremo norte) tiene el punto en el filo de la aleta dorsal y las barras están definidas en la parte baja del cuerpo pero son debilmente visbles, o incluso desaparecen, en la parte superior. Los individuos de Kavala Island en el Congo, presentan el típico punto negro cercano al filo de la aleta dorsal pero, a diferencia de la población anterior, no muestran las barras verticales.
La población de Kapampa, que es la más suereña de las encontradas en el Congo, presentan el punto negro continuado con una o dos barras verticales pero se caracteriza sobre todo por tener unas barras verticales azules en la parte inferior de su cuerpo justo donde las otras variedades presentan puntos.
Las poblaciones de Halembe y las encontradas a lo largo de la costa presidida por la cordillera de Kungwe se parecen mucho una a la otra. Ambas presentan unas barras verticales muy marcadas en la parte inferior de su cuerpo y el punto de la aleta dorsal que continua a una o dos de las barras.

24 enero 2009

Género Spathodus

En este género de los gobios del lago Tanganica encontramos dos especies: Spathodus erythrodon y S. marlieri. Si comparamos ambas especies no parecen que pertenezcan al mismo género y sería así si no fuera por la morfología de sus dientes. Ambos peces comparten el rasgo de tener la dentición con forma cilíndrica.
Spathodus erythrodon es un cíclido escaso y raro de encontrar que habita las aguas de los dos tercios norte del lago Tanaganica. Al alimentarse de algas y demás cubierta vegetal que crece sobre las rocas su tracto digestivo tiene una longitud de dos a tres veces el tamaño del pez. Los machos de esta especie alcanzan una longitud de 7.5 cm (las hembras son un poco más pequeñas) y se parecen mucho a los machos de Eretmodus cyanostictus. Como hemos dicho anteriormente en la ficha de E. cyanostictus, si no llega a ser por la diferencia en la dentición pertenecerían al mismo género. A simple vista es muy difícil distinguir estos dos cíclidos entre si. Las poblaciones de más al norte del lago de S. erythrodon no tienen barras verticales como el Eretmodus por lo que es fácil distinguir allí a estas dos especies. Pero en las costas del Congo, S. erythrodon presenta barras en su mitad inferior del cuerpo. Se pueden distinguir, a estos dos cíclidos, por la posición de la boca. Si la boca la tiene orientada hacia abajo será Eretmodus pero si la tiene justo al final de la mandíbula y apuntando al frente será S. erythrodon (este dato de diferenciación sólo es válido para diferenciar a E. sp "cyanostictus North" de E. erythrodom).
Spathodus marlieri es el mayor (los machos alcanzan 10 cm) y el que menor densidad de población presenta de los gobios del Tanganica. Además pasa por ser el más violento de todos ellos. Solamente lo encontramos en el tercio norte del lago, habitando las zonas más profundas (por decirlo de alguna forma) del hábitat rocoso superficial. Al contrario que el resto de gobios, S. marlieri no necesita vivir en contacto con las rocas y es capaz de nadar con soltura sobre sustratos de arena. La dieta de este pez consiste en algas, invertebrados y arena, aunque se desconoce si se ingiere de forma fortuita o no. Con la arena es inevitable que una gran cantidad de diatomeas y otros organismos celulares sean ingeridos junto a ella por lo que este aporte es fundamental en la dieta de esta especie.
Es muy fácil diferenciar a S. marlieri de S. erythrodon y de cualquier otro gobio del Tanganica, porque presenta un gran bulto craneal.
Hasta hace poco se consideraba tanto a S. marlieri como a S. erythrodon incubadores biparentales pero recientes reseñas señalan que S. marlieri es realmente incubador maternal.

17 enero 2009

¿Malawi o Tanganica?

Este es un tema recurrente en los distintos foros que he visitado y en las pocas conversaciones que he mantenido con otros aficionados. Vaya por delante, y si aún no lo sabéis, que yo soy más de Tanganica. Me decidí por este lago porque el agua de mi ciudad es perfecta para mantener los cíclidos de allí y porque simplemente me quedé prendado de ellos.
Volviendo al tema, siempre se apuntan las mismas virtudes/defectos para cada lago a la hora de tirar hacia uno u otro. Del Tanganica se suele decir que no son necesarios tantos litros como en el Malawi para montarte un acuario divertido y que hay más variedad en hábitos alimenticios, reproductivos y de comportamiento; mientras que los grandes puntos a favor del Malawi son el enorme atractivo estético de sus peces, la mayor facilidad a la hora de reproducirlos y de mezclar especies. Así que al final, todo queda en la eterna lucha de comportamiento (Tanganica) contra color (Malawi) y, según tus preferencias, acabarás en un lago u otro porque ser aficionado a los dos como que no está bien visto.
Cada cual tendrá sus motivos para decantarse por uno u otro lago pero, por supuesto, no son más válidos que los que le sirven a otro aficionado para elegir el contrario y aquí viene la intención real de esta entrada: nadie es mejor por criar discos, o mantener peces marinos o por tener 20 acuarios dedicados en exclusiva a Tropheus.
Todos los aficionado a la acuariología somos compañeros de fatigas y por eso me molesta muchísimo cuando entre nosotros nos descalificamos. Pero lo que me molesta más aún es cuando se toman las diferentes disciplinas de la acuariofilia como etapas anteriores al paso hacia el acuario marino. Se puede ser igual de aficionado especializado con gupis o con los corales más caros y si me apuras, para mucha gente el no mantener especies más delicadas no es por motivos de falta de conocimientos sino económicos. Por esto nadie es mejor que nadie por mantener ciertas especies. A lo que nos deberíamos dedicar los aficionados es a intentar cuidar a nuestros peces lo mejor posible y a seguir aprendiendo los unos de los otros.
Así que da igual de lo que seas, Tanganica o Malawi, vivíparos o bettas, discos o marino; por favor cuida de tus peces y se feliz.

07 enero 2009

African cichlids II Tanganyika I: TROPHEUS

Antes de nada me gustaría decir que el libro me ha parecido espectacular y que la percepción de calidad en el contenido sobrepasa por mucho a la percibida en los libros de Ad Konings. Esto no quiere decir que los escritos por el holandés sean malos, ni mucho menos, pero este libro sobre Tropheus es diferente y se agradece. No lo tengo masticado del todo pero si lo suficiente para hacerme una idea de él. Me decidí a comprarlo dado mi bajo nivel sobre los denominados Reyes del Tanganica y no he podido invertir mejor mi dinero.
El libro comienza con unos capítulos sobre el lago Tanganica y sus características generales, para luego seguir con nociones básicas sobre el mantenimiento de Tropheus en acuario. Nada nuevo si se dispone de Internet pero, aún así, hay ideas interesantes para extraer. Una de las que más me ha llamado la atención es la de ir cambiando la composición de la alimentación según la temperatura del agua y por tanto las necesidades de los peces.
Después de estos capítulos interesantísimos viene la explicación de su teoría sobre los linajes de las diferentes especies, o variedades según el autor del libro ya que para él habría que reorganizar y renombrar al género Tropheus. Todo muy bien explicado, con varios gráficos y mapas de ubicación, árboles filogenéticos, etc...esta parte me gusta especialmente ya que es como más científica. Estos capítulos son para leerlos despacio y con un buen diccionario inglés-español cerca para no perder detalle.
La segunda parte del libro es la descripción de cada linaje. Para cada uno de ellos presenta un mapa con la localización de cada variedad en el lago y un pequeño dibujo de cada una, es muy práctico, además de una pequeña explicación de cada linaje. Luego describe cada variedad o población que el autor denomina con la localización en el lago o con unos número al estilo 1.1, 1.4, etc. De cada variedad nos indica los nombres con los que se comercializa, quién la descubrió, cuando fue la primera importación con fines comerciales, su distribución en el lago, su color y forma y para acabar curiosidades sobre cada población. Además, incorpora un dibujo muy ilustrativo y sencillamente genial para identificar a cada población, y alguna foto de los Tropheus más comunes en los comercios. También incluye un pequeño mapa en donde se señala individualmente el lugar de origen de cada población.
Cuando termina todas las descripciones de las diferentes poblaciones, nos encontramos con un completo atlas en el que tenemos fotos de las distintas variedades, incluso dentro de la misma variedad en diferentes estadíos de la vida de pez, y pequeños iconos con información de carácter general sobre el pez en cuestión. Cabe destacar como la editorial del libro pone a disposición del cliente más pegatinas para ir completando el atlas con las nuevas variedades que pudieran aparecer o simplemente para aquellas que en el momento de la publicación de libro no las tuvieran. Termina el libro con el imprescindible índice alfabético y con otro de las poblaciones. Por último, hay regalo y es que se incluye un poster del lago y con dibujos de todas las poblaciones de Tropheus y su localización.
Como ya he dicho al principio, es un libro muy recomendable para todos los apasionados de los cíclidos africanos y el cual recomiendo su compra por la profundidad de su contenido y el toque diferente nada común en libros dedicados a los peces ornamentales.